Reseña:

 Es la difícil historia de amor entre la señora que cosía para afuera y el señor tipógrafo.
Hay un momento en la vida, en el que uno siente la necesidad de encontrarse, de ponerle nombre a las cosas, de intentar ver el pasado y lo que fuimos.
Saber de dónde venimos, y entender nuestros comportamientos.
Mis padres no eran famosos. Sus vidas se terminan antes que la mía, pero aún así son los protagonistas de mi vida favorita.
Eran profesionales de las tragedias familiares, de los velorios en las casas, seguidores de la radio Spica y la lectura de diarios viejos con noticias también viejas.
Me propuse contar la historia sobre mis padres, o más bien una obra de teatro sobre ellos porque quise conocerlos. Y de paso también, conocerme. Porque uno es producto de esa esencia.
Y también porque quise devolverles el rostro a los desconocidos de siempre y tratar de reparar un poco este atribulado mundo.